Las islas fueron descubiertas por los occidentales en 1793, por el inglés Raven, capitán de un barco mercante de Sídney, que las llamó Loyalty Islands (islas de la Lealtad) destacando el trato amistoso de los habitantes. Las Islas de la Lealtad ... Lifou, Mare y Ouvea, tierras de leyenda y tradición, islas místicas de belleza única ...Dotado de una fabulosa riqueza natural, los paisajes más suntuosos que Nueva Caledonia tiene para ofrecer se encuentran ocultos dentro de estas islas: largas playas desiertas de arena blanca, encantadoras lagunas cristalinas color turquesa, acantilados majestuosos coronados de pinos coloniales, rocas legendarias levantándose como fortalezas medievales, los peces y la fauna de coral se encuentran en ningún otro lugar del mundo, multicolor vida marina contaminada por el hombre... Y por último, las personas. Los isleños de fidelización han sabido conservar las tradiciones más potentes del Territorio de Nueva Caledonia, un entorno imaginario forjado con mitos y leyendas. Cuando usted visita las Islas de la Lealtad, se llega a conocer a las personas y sus creencias.